El 30 de abril coincide con el 23 aniversario de la canonización de santa Sor Faustina Kowalska, de la Congregación de la Madre de Dios de la Misericordia, y gran apóstol de la Divina Misericordia. La canonización tuvo lugar en la plaza de San Pedro, en Roma y en el santuario de Cracovia-Lagiewniki en 2000, tal como Sor Faustina había descrito 60 años antes con todos los detalles a finales de marzo de 1937 (cf. Diario 1044-1048). Quién fue testigo de aquel acontecimiento sabe bien que esta visión se cumplió con toda exactitud. En este día, el Santo Padre Juan Pablo II introdujo la Fiesta de la Misericordia Dios para toda la Iglesia, y el mensaje de la Misericordia transmitido por Santa Sor Faustina lo dio a toda la Iglesia para el tercer milenio de la fe. El testimonio de la curación milagrosa, que analizada como prueba para la canonización, así como una descripción del evento y la homilía de la canonización que el Santo Padre predicó lo pueden encontrar en la página web www.faustyna.pl. Cada día agradecemos por este “don de Dios para nuestro tiempo», como Juan Pablo II llamó a Santa Faustina y al mensaje de la Misericordia. Millones de personas en todo el mundo, que forman el Movimiento Apostólico de la Divina Misericordia, se unen a su misión profética de anunciar al mundo -.a través del testimonio de vida, mediante obras, palabras y oraciones – la verdad bíblica sobre el amor misericordioso. Este movimiento representa la «nueva congregación», cuya fundación pedía Jesús. Que este nuevo aniversario de la canonización de la Apóstol de la Divina Misericordia sea una oportunidad no sólo para dar gracias a Dios por ello, sino también para profundizar su rico patrimonio.