El próximo 2 de abril es el Domingo de la Pasión del Señor, también conocido como Domingo de Ramos, con el que se inicia la Semana Santa. En este día, en las misas se leerá el Evangelio de la Pasión de Jesús. La Eucaristía estará precedida por una procesión con palmas o simplemente se hará la ceremonia de la bendición de las palmas, como memorial de la entrada solemne de Jesús a Jerusalén. Las palmas son un símbolo del renacer de la vida divina en las almas de los fieles. En el santuario de Cracovia-Lagiewniki, la procesión solemne de las palmas, con el obispo Jan Zając, los sacerdotes, las religiosas y los fieles, saldrá de la capilla con la milagrosa imagen de Jesús Misericordioso y la tumba de San Faustina a las 10:15 h de la mañana, y se dirigirá a la basílica, donde se celebrará la Eucaristía. El relato evangélico de la solemne entrada de Jesús a Jerusalén, de alguna manera, lo complementa la experiencia mística de santa Faustina, quien en su «Diario» escribió: “Vi a Jesús montado en un burrito, y a los discípulos, y a una gran muchedumbre que iba alegre junto a Jesús con ramos en las manos; y algunos los tiraban bajo los pies donde pasaba Jesús y otros mantenían los ramos en alto, brincando y saltando delante del Señor sin saber qué hacer de alegría. Y vi otra muchedumbre que salió al encuentro de Jesús, con rostros igualmente alegres y con ramos en las manos, gritando sin cesar de alegría; había también niños pequeños, pero Jesús estaba muy serio; el señor me dio a conocer lo mucho que sufría en aquellos momentos. Yo no veía nada fuera de Jesús, que tenía el Corazón saturado por la ingratitud de los hombres” (Diario 642). “Jesús me hizo saber cuánto había sufrido en ese cortejo triunfal. Los “Hosanna” resonaban en el Corazón de Jesús con “Crucifícalo”. Jesús me lo hizo sentir de modo singular” (Diario 1028).